Tiempo Ordinario/28 salterio 4ªSemana.Tomo IV
Domingo 09 Octubre
Santos DIONISIO ob, JUAN LEONARDI pb,
Luis Bertrán pb, Abrahán, patriarca
PALABRA:
• 2Reyes 5,14-17: Naamán de Siria bajó al Jordán y se bañó siete veces, como había ordenado el profeta Eliseo, y su carne quedo
limpia de la lepra, como la de un niño.Volvió con su comitiva y se presentó al profeta, diciendo: «Ahora reconozco que no hay dios en toda la tierra más que el de Israel. Acepta un regalo de tu servidor». Eliseo contestó: «¡Vive Dios, a quien sirvo! No aceptaré nada».Y aunque le insistía, lo rehusó. Naamán dijo: «Entonces, que a tu servidor le dejen llevar tierra, la carga de un par de mulas; porque en adelante tu servidor no ofrecerá holocaustos ni sacrificios a otros dioses fuera del Señor».
⦁ Salmo 97,1-4: El Señor revela a las naciones su salvación.
⦁ 2Timoteo 2,8-13: Haz memoria de Jesucristo el Señor, resucitado de entre los muertos, nací del linaje de David. Este ha sido mi Evangelio, por el que sufro hasta llevar cadenas, como un malhechor. Pero la palabra de Dios no está encadenada. Por eso lo aguanto todo por los elegidos, para que ellos también alcancen la salvación, lograda por Cristo Jesús, con la gloria eterna. Es doctrina segura: Si morimos con él, viviremos con ÉI. Si perseveramos, reinaremos con él. Si lo negamos, también él nos negará, Si somos infieles, él permanecerá fiel, porque no puede negarse a sí mismo.
⦁ LUCAS 17,11-19: Yendo Jesús camino de Jerusalén, pasaba entre Samaria y Galilea. Cuando iba a entrar en un pueblo, vinieron a su encuentro diez leprosos, que se pararon a lo lejos y a gritos le decían: «Jesús maestro, ten compasión de nosotros». Al verlos, les dijo: «Id a presentaros a los sacerdotes».Y mientras iban de camino, quedaron limpios. Uno de ellos, viendo que estaba curado, se volvió alabando a Dios a grandes gritos, se echó por tierra a los pies de Jesús, dándole gracias. Este era un samaritano. Jesús tomó la palabra y dijo: «¿No han quedado limpios los diez?; los otros nueve, ¿dónde están? ¿No ha vuelto más que este extranjero para dar gloria a Dios?».Y le dijo: «Levántate, vete: tu fe te ha salvado».
ORACION:
SEÑOR, te disgustó ver que sólo uno de los diez leprosos curados acudió a darte las gracias. Yo quiero ser bien nacido, y por eso no pierdo ocasión de agradecerte lo muchísimo que me has dado: todo lo bueno que tengo. Y veo que el mejor modo de agradecerte los dones que me has regalado es ponerlos al servicio de los demás y ser fiel a la confianza que has depositado en mí. Ante tu actuación en mi vida, siempre gratitud; ante tu palabra de Misericordia y de salvación, aceptación incondicional. (Sigue tu oración personal).