Tiempo Ordinario/24° Salterio 4° Semana. Tomo IV
Sábado 17 Septiembre
Santos ROBERTO BELARMINO ob dc,
Hildegarda de Bingen vg dc,
Lamberto oh, Columba vg mr, Pedro de Arbués pb mr
PALABRA:
Jesús dijo a la gente esta parábola: «Salió el sembrador a sembrar su semilla. Al sembrarla, algo cayó al borde del camino, lo pisaron, y los pájaros se lo comieron. Otro poco cayó en terreno pedregoso y, al crecer, se secó por falta de humedad. Otro poco cayó entre zarzas, y las zarzas, creciendo al mismo tiempo, lo ahogaron. El resto cayó en tierra buena y, al crecer, dio fruto al ciento por uno». Dicho esto, exclamó: «El que tenga oídos para oír, que oiga». Entonces le preguntaron los discípulos: «¿Qué significa esa parábola?». Él les respondió: «A vosotros se os ha concedido conocer los secretos del reino de Dios; a los demás, sólo en parábolas, para que viendo no vean y oyendo no entiendan. El sentido de la parábola es este: La semilla es la palabra de Dios. Los del borde del camino son los que escuchan, pero luego viene el diablo y se lleva la palabra de sus corazones, para que no crean y se salven. Los del terreno pedregoso son los que, al escucharla, reciben la palabra con alegría, pero no tienen raíz; son los que por algún tiempo creen, pero en el momento de la prueba fallan. Lo que cayó entre zarzas son los que escuchan, pero, con los afanes y riquezas y placeres de la vida, se van ahogando y no maduran. Los de la tierra buena son los que con un corazón noble y generoso escuchan la palabra, la guardan y dan fruto perseverando».
ORACIÓN:
1Corintios 15,35-37.42-49; Salmo 55,10-14 • LUCAS 8,4- 15
SEÑOR, me veo reflejado en la tierra al borde del camino, entre piedras y zarzas. Pero confío en la Misericordia del mejor sembrador, y prepararás mi corazón para que sea la buena tierra que dé mucho fruto. (Sigue tu oración personal).