Salterio 1° Semana. Tom II
Santos León ob, Eleuterio ob. Beatos Francisco y Jacinta de Fátima, Julia Rodzninska vg mr
Papa Francisco: Si no sois mejores... Quien entra en la vida cristiana, el que acepta seguir este camino, tiene exigencias superiores a las de los demás. No tiene ventajas superiores. ¡Ni Exigencias superiores, como las exigencias de la convivencia o el tema de la relación negativa hacia los hermanos. Las palabras de Jesús no dejan vía de escape: Habéis oído que se dijo en el pasado no matarás. Y el que mata debe ser llevado al tribunal. Pero yo os digo que todo aquel que se enoja contra su hermano merece ser condenado, y todo aquel que lo insulta merece ser castigado por el tribunal. Cuando ya en tu corazón hay algo negativo contra el hermano y se expresa con un insulto, con una maldición con enojo, hay algo que no funciona, y te tienes que convertir. Y pedir al Señor la gracia de ajustar nuestra vida a esta nueva ley, que es ley de la mansedumbre, ley del amor, ley de la paz.
PALABRA:
Dijo Jesús a sus discípulos: «Habéis oído que se dijo: "Amarás a tu prójimo" y aborrecerás a tu enemigo.Yo, en cambio, os digo:Amad vuestros enemigos, y rezad por los que os persiguen. Así seréis hijos de vuestro Padre que está en el cielo, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y manda la lluvia a justos e injustos. Porque, si amáis a Ios que os aman, ¿qué premio tendréis? ¿No hacen lo Mismo también los publicanos?Y si saludáis sólo a vuestros hermanos, ¿qué hacéis de extraordinario? ¿No hacen lo mismo también los gentiles? Por tanto, sed perfectos, como vuestro Padre celestial es perfecto».
ORACIÓN:
Deuteronomio 26,16-19; Salmo 118,1-8 • MATEO 5,43-,
CRISTO, tu gran "sermón de la montaña", el mejor programa de vida para el cristiano define hoy la esencia de la vida cristiana: la misericordia, el amor. Pero no un amor cualquiera: para ser digno hijo del Padre, me dices que he de amar a mis enemigos de palabra y de obra, y orar por quienes me hacen mal. No hay otro camino para ser"perfecto como tu Padre celestial". Pero ese camino es de fuertes y esforzados y yo soy un pobre hombre, una pobre mujer, que apenas puedo amar a mis familiares y amigos. ¿Tú nos lo mandas, conociendo nuestra debilidad? Sí, y sabiendo que podemos participar de tu poder si confiamos en ti. ¡Ayúdame! (Sigue tu oración personal).
